Los 22 niveles de maldad
Los 22 niveles de maldad según la escala de Michael Stone
Michael Stone, psiquiatra forense y profesor en la Universidad de Columbia, es toda una referencia en el conocimiento de la “anatomía del mal”. Fue él quien desarrolló la escala de maldad, una herramienta tan curiosa como llamativa. Dicha escala pretende ser útil para valorar los diferentes grados de agresividad o pulsiones psicopáticas que el lado más oscuro del ser humano puede llegar desarrollar.
Hay quien define la “escala de maldad” como un descenso al infierno de Dante, ahí donde cada círculo o cada eslabón define una serie de pecados, de actos cuya perversidad oscilan desde aquellos que todos justificaríamos o entenderíamos hasta esos que sencillamente navegan en el reverso más abyecto e incomprensible de nuestra esencia como personas.
Brenda Spencer |
Stone dirigió el programa Most Evil (en España, Perfil de un psicópata), donde expone dicha clasificación que él denomina “escala de maldad”. En los distintos capítulos del programa se muestra la vida y crímenes de varios asesinos, sobre los cuales se realiza una investigación y se explica cada caso en detalle, teniendo en cuenta todos los factores que hayan podido influir, predisponer y explicar el porqué de su conducta, para poder clasificarlo posteriormente en dicha escala.
Charles Starkweather y Caril Ann Fugate |
Una herramienta para valorar el grado de psicopatía
La escala de la maldad fue creada minuciosamente atendiendo a muchos tipos de factores: ambientales, neurológicos y genéticos. El objetivo era desglosar cada caso en unidades pequeñas, como si de moléculas se tratase, para así tener la mayor precisión posible y determinar la razón por la que una persona puede llegar a cometer algo tan atroz como un asesinato.
El Merodeador nocturno |
En la escala de la maldad se plantean preguntas que ayudan al profesional a conocer las particularidades de cada caso. Por ejemplo, exploran si el sujeto tuvo una infancia traumática, sus motivaciones para cometer asesinatos, por qué tienen preferencias por unas víctimas u otras... Un punto clave en esta escala de maldad es, valga la redundancia, la maldad y el sadismo propiamente dicho plasmado en el crimen, es decir, la meditación de éste, el método de muerte que se utilizó, etc. Por tanto, se utilizan juicios de valor, de moralidad, de ética y otros para clasificar a los sujetos en un punto en concreto dentro de esta escala.
Los asesinos del páramo |
Analizando la mente y el cerebro del asesino
En adición, Stone nos permite adentrarnos profundamente en la mente del asesino, examinando cómo funciona el cerebro de las personas que cometen delitos de sangre, así como sus sentimientos hacia la víctima en función del grado de maldad en el que se encuentren a partir de su escala de maldad.
En algunas ocasiones se complementa la información con pruebas de escáner cerebral, haciendo visualizar a la persona diferentes fotografías y palabras desagradables emocionalmente, o bien de lo contrario, es decir, imágenes que evocan sentimientos positivos como el amor.
Ted Bundy |
La escala en cuestión es una jerarquía que asciende progresivamente desde el nivel 1 hasta el 22, siendo mínima o nula maldad (nivel 1) a máxima (nivel 22).
Después de esta introducción, vamos a conocer el modelo de la escala y sus distintos niveles.
Primer grupo: homicidio justificado
- Nivel 1: mataron exclusivamente en legítima defensa, no muestran ningún tipo de tendencia psicopática.
Segundo grupo: maldad por celos y odio
En este segundo grupo se engloban a todos esos perfiles que cometen asesinatos por celos, quienes se mueven por la venganza y quienes además son capaces de actuar como cómplices, hasta el punto de colaborar en un acto violento. Asimismo, cabe matizar que a pesar de que muchas de estas personas muestren rasgos narcisistas y una agresividad considerable, no presentan rasgos psicopáticos. Veámoslos con detalle.
- Nivel 2: crímenes pasionales cometidos por amantes celosos. Pueden resultar inmaduros y/o egocéntricos pero no son psicópatas.
- Nivel 3: compañeros, socios o amantes entusiastas de peligrosos homicidas. Tienen personalidad impulsiva y aberrante con rasgos antisociales.
- Nivel 4: matan en autodefensa, pero provocaron en gran medida que sucediera la agresión hacia ellos.
- Nivel 5: individuos traumatizados psicológicamente que están desesperados y asesinan a familiares que abusaron sexualmente de ellos. Pueden incluirse drogodependientes que el motivo de su asesinato es para conseguir dinero o droga, pero no poseen características psicopáticas significativas. Tienen cierto remordimiento por los actos cometidos.
- Nivel 6: actúan impulsivamente, “en caliente”. No tienen características psicopáticas marcadas.
- Nivel 7: individuos altamente narcisistas, no distinguibles de personas con algún tipo de trastorno psicótico, matan a gente de su entorno principalmente por celos o pasión.
Tercer grupo: rozando la frontera de la psicopatía
Hay un límite confuso, complejo y caótico donde los expertos tienen grandes dificultades a la hora de diagnosticar al perfil psicopático. En este tercer grupo se aglutinan todas esas personas, todas esas conductas violentas que por sí mismas no siempre trazan con clara exactitud a la personalidad psicopática (aunque sí hay rasgos puntuales o temporales que lo evidencian).
- Nivel 8: personas no psicópatas pero con altos niveles de furia reprimida, llegan a matar cuando algún evento la desencadena o enciende.
- Nivel 9: amantes celosos despechados con características psicopáticas.
- Nivel 10: asesinos que mataron a gente que se interponía en su camino o testigos que pudieran delatarle. Tienen personalidad egocéntrica pero no psicopática claramente distinguible.
- Nivel 11: lo mismo que el nivel diez pero esta vez con personalidad psicopática notable.
- Nivel 12: psicópatas ansiosos de poder que asesinaron cuando se sintieron acorralados.
- Nivel 13: psicópatas repletos de furia, los cuales perdieron el control de ésta.
- Nivel 14: conspiradores psicópatas despiadadamente egocéntricos, desean obtener un beneficio de alguien.
- Nivel 15: psicópatas multihomicidas que en un día de estallido de furia (spree killing) matan a tantas personas se crucen por delante suyo a sangre fría.
- Nivel 16: psicópatas que cometen varios o múltiples actos criminales, no se conforman con asesinar una vez y pueden incluir actos viciosos.
Cuarto grupo
En este último grado de la escala de maldad tenemos sin duda el último círculo de Dante. La maldad más primigenia y atávica. Hablamos de psicópatas incapaces de sentir remordimiento alguno y para los que el objetivo del asesinato es el placer que les produce el propio acto violento.
- Nivel 17: asesinos seriales sexualmente perversos y torturadores-asesinos, aunque su finalidad principal es la violación pues el homicidio posterior es con el propósito de que la víctima no lo denuncie.
- Nivel 18: homicidas que suelen torturar previamente a sus víctimas, aunque su principal motivación es el asesinato.
- Nivel 19: psicópatas inclinados hacia el terrorismo, la subyugación, violación e intimidación.
- Nivel 20: torturadores y asesinos psicóticos en quienes la tortura es la principal motivación.
- Nivel 21: psicópatas interesados en extremo en la tortura, pero de quienes no se sabe a ciencia cierta si han cometido homicidios.
- Nivel 22: torturadores extremos y asesinos psicopáticos, los cuales la tortura es la principal motivación. Sus crímenes involucran tortura sexual prolongada, seguida por el asesinato de sus víctimas.
Por último, aquí les facilito el link de un episodio, para que podáis observar cómo se clasifican a distintos homicidas distinguidos en la escala de maldad.
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